Occidentalización de Oriente?

Algo se mueve en el noreste africano. En el último mes se han registrado revueltas populares en Túnez y Egipto y se ha insistido en los medios  sobre el riesgo de que  estos fenómenos puedan «contagiarse» (en un uso extremadamente simplista de la terminología)  a otros paises de la zona como por ejemplo Sudán, Libia o Argelia.

En los medios occidentales se sigue un guión hollywoodiense para relatar los acontecimientos. En una línea argumental tremendamente simple, los acontecimientos se describen básicamente del siguiente modo: los bravos pueblos de la zona se levantan ante sus gobiernos dictatoriales que les han sumergido en una situación económica de desempleo e inflacción galopante y que, además, les obliga a claudicar enviando al ejército y la policia a las calles.

Si uno se deja llevar por la fuerza de los medios, hasta puede parecernos una historia muy verosímil (la hemos presenciado  tantas y tantas veces antes en China, Ucrania, Irán, etc que nos puede parecer la única explicación lógica). Sin embargo, resulta necesario realizar un análisis más crítico de la situación para entender lo que está sucediendo. 

La crisis económica y la especulación financiera también parecen estar en el núcleo  de estas revueltas. Los objetivos serían los mismos que se persiguen en occidente: implementar reformas que gradualmente implanten una «globalización estructural», por supuesto en las condiciones más favorables para el poder financiero, y de este modo preparar el camino para el futuro gobierno único. Pero además, en Oriente Medio y África existen motivaciones que van más allá de las propias reformas de los mercados laborales, financieros, etc. Las reformas religiosas también serán fundamentales. Como analizaremos más adelante, lo que parece pretenderse es la homogeneización de las religiones más importantes de nuestro planeta para generar un híbrido del que pudiera surgir la futura religión única. 

Revueltas que se apoyan en la especulación en el mercado de alimentos

La crisis financiera en Europa está llevando a recortes salariales y de inversión pública radicales. Estas medidas junto con un incremento importante de la presión impositiva, describen la atmósfera asfixiante en la que se están negociando las reformas estructurales que se aplican en la actualidad en dicho continente. En OR hemos seguido de modo especial la magnitud de dichas reformas en España y hemos mostrado como todo el engranaje del entorno financiero internacional amenazaba al pais con una posible bancarrora  para forzar la aprobación de unas condiciones que han supuesto una pérdida de derechos para las clases media y obrera.

Hace tan sólo unos días que, envueltos en un antidemocrático clima de hermetismo, síndicatos gobierno y empresarios cerraban un acuerdo para la reforma de las pensiones que, de no haberse producido antes del 28 de Enero se habría introducido por decreto. Curiosamente unos días más tarde se publicaban los resultados económicos del último cuatrimestre de 2010 arrojando un crecimiento económico del 0.2%. Hubiese este resultado afectado de algún modo al curso de las negociaciones de haberse conocido antes la firma de los acuerdos?

  En otros otros paises europeos la situación no es muy diferente. El impuesto sobre el valor añadido IVA (VAT en inglés) ha pasado en algunos paises del 16% a valores superiores al 20%. En paises como Portugal o Rumanía este impuesto llega al 23 y 24%. A esta presión impositiva, hay que añadir la inflacción en algunos sectores generada como producto de la crisis económica y de la especulación.  En concreto, en el sector alimenticio se están registrando grandes incrementos en los precios de productos básicos. Sin embargo esta inflacción alimentaria está afectando con más virulencia a los paises del norte de África, donde, curiosamente, están estallando unas revueltas populares que derivarán en cambios sociopolíticos.

Como describía el pasado 30 de Enero Javier Blas en el diario hoydigital:

«Primero, los fracasos en los cultivos; segundo, las restricciones sobre las exportaciones, y tercero, los inicios de disturbios alimentarios a consecuencia de los aumentos de precios. Ahora las naciones importadoras de alimentos están respondiendo a un profundo incremento en las compras y en el acaparamiento, guiando a que los precios de las materias primas agrícolas sean aún más altos.»

La especulación que sacudió al mercado alimenticio entre 2007 y 2008 podría haber sido tan sólo un test para probar mecanismos de generación de revueltas populares con capacidad para acabar con ciertos regímenes. Su efectividad para la alteración de la realidad geopolítica en la zona, puede ser apreciada estos dias con la caida de Mubarak en Egipto.

«Como sucedió hace tres años, una compra acelerada está llegando desde un amplio espectro de las naciones en desarrollo a medida que los gobiernos reaccionan a la creciente intranquilidad social relacionada  con el aumento de los precios de alimentos a nivel local.

“Estamos viendo mucha preocupación respecto el incremento de los precios y la seguridad alimentaria y eso está guiando a las compras”, dice Erin Fitzpatrick, un analista de granos del Rabobank, una de las mayores instituciones crediticias en la industria de la agroempresa.

Pero los comerciantes dicen que el llamado “efecto acordeón”, de comprar más hoy para guardar contra los más altos precios de mañana, sólo traerá incrementos adicionales en los precios. Las compras extras son particularmente grandes en África del Norte y el Medio Oriente, regiones que son más dependientes de los mercados internacionales para los suministros de alimentos.

Algeria compró 800,000 toneladas de trigo el pasado miércoles, llevando el total desde el inicio del año a 1.7 millones de toneladas. Aunque este país norafricano  es uno de los mayores importadores de trigo del mundo, que compra entre 5 y 5.5 millones de toneladas al año, sus compras hasta el momento en 2011 lucen muy por encima de los patrones normales, dicen los analistas.

Arabia Saudita, que está entre los 10 más grandes importadores de trigo, dice que planea duplicar el tamaño de sus reservas de trigo para poder cubrir la demanda del año.

Hussein Allidina, jefe de Investigación de Materia Prima en Morgan Stanley, dice que la gran contribución del trigo para la inflación alimentaria expone la producción al acaparamiento, mientras los gobiernos buscan combatir la creciente inflación alimentaria local.

“Este fenómeno es que en gran parte tiene la culpa de los recientes aumentos de precios, ya que los países del Medio Este y África del Norte corrieron a los mercados globales para fortalecer las reservas a consecuencia de la intranquilidad política en Túnez”.

Podrían las compras de algunos paises ricos como, por ejemplo, Arabia Saudita haber contribuido a la generación de una espiral inflaccionaria en el mercado de los alimentos que haya acabado por arrastrar a otros paises de la zona?

Podría este mismo tipo de especulación llevar a una situación semejante a paises como del sur de Europa como Grecia, España o Portugal? A juzgar por los objetivos ya alcanzados por las reformas en dichos paises y la satisfacción mostrada por ciertos cancilleres ante las mismas, parece que no llegará la sangre al rio. Sin embargo, qué habría ocurrido si los gobiernos se hubieran negado a implementar dichas reformas? Habrían aguantado sociedades con niveles de desempleo del 20% un año más en dicha situación y un incremento drástico en los precios de los alimentos? Acaso no podría haberse generado el mismo tipo de escenario que hoy se vive en el norte de África? El presidente de la comisión europea, Durao Barroso,  ya había advertido en 2009 a la unión de sindicatos europeos sobre el peligro de que la situación económica pudiera desembocar en posibles golpes de estado que implantasen regímenes militares al estilo de los que gobernaron el sur de Europa en el siglo XX. En el último semestre de 2010 hemos asistido a un linchamiento público de los líderes de algunas de las naciones que colocaban dudas respecto a la implantación de las reformas (principalmente Zapatero y Berlusconi). Hubiesen dichos lideres seguido el mismo destino de Mubarak de no modificar su rumbo a tiempo?

Occidentalización de Oriente Medio

En una entrada reciente, recuperábamos el trabajo de Serge Monast, un supuesto periodista que investigó el fenómeno NWO a principios de los 90. En varios de sus artículos describía un proyecto elaborado por la NASA y denominado como Blue Beam que estaría destinado, de un modo muy resumido, a la «correción» de las religiones actuales y su sustitución por una «religión única». Como en cualquier receta, cada paso significativo requiere una preparación previa de los «alimentos». La implantación de una «religión única» que sustituya a las actuales, no podrá implementarse sin que se aplique una etapa de «preparación». Quizá algunas de las revueltas a las que asistimos hoy, desemboquen en gobiernos que promuevan una especie de globalización religiosa. La lenta, pero progresiva, homogeneización religiosa será necesaria para llegar a tal punto.

Curiosamente, la semana pasada se ha estado celebrando en todo el mundo la recientemente introducida Semana de la Harmonia Religiosa (harmonía interconfesional tal y como se ha traducido al español). El pasado 20 de Octubre de 2010, la asamblea general de la ONU la aprobaba unánimemente mediante resolución declarando como tal a la primera semana de Febrero de cada año.

En la edición portuguesa del diario gratuito Metro del pasado 31 de Enero podía leerse lo siguiente sobre este evento:

«Por todo el mundo se asiste a un conflicto por y sobre la religión. La esencia de este combate es si las personas están preparadas para mirar a las de una religión diferente con respeto y dignidad, y si, por qué no?, hasta con amor, o prefieren verlas como enemigos porque no comparten la misma religión…

Esta resolución anima a las personas que creen en la harmonía interreligiosa a aparecer y hablar en voz alta… La resolución es única en la promoción de las relaciones interreligiosas llamando la atención para el respeto mútuo algo que está en la base teológica y de las escrituras. Su mención de «amar el bien y amar al prójimo»  es importante porque para los creyentes el bien es Dios. Amar el bien y amar al prójimo es la esencia de la buena voluntad para todas las personas. De ahí que la resolución incluya a todas las personas del mundo, de todas las religiones, fés y creencias y a todos aquellos que no profesan ninguna religión.

La semana mundial de la harmonia interreligiosa tiene un potencial sin precedentes para cambiar las tensiones de tipo religioso. Qué es lo que hay que hacer? Si es usted una personalidad religiosa o profesor, todo lo que tiene que hacer es dedicarle un sermón, escrito u otras actividades al tema de la harmonia interreligiosa cada primera semana de Febrero. Si quiere puede divulgar su contribución en la página web www.worldinterfaithharmonyweek.com«

Curiosamente en la columna de la derecha podían leerse los siguientes titulares: «Los egipcios no paran sus protestas: Lo paises árabes continuan bajo fuego y el mundo está cada vez más preocupado sobretodo con Egipto.»; «Sudán al borde de la secesión». El mensaje subliminal parece más que claro.

Las líneas anteriores no fueron escritas por ningún periodista portugués, sino que son de la autoría de Tony Blair, ex primer ministro británico y católico, y el príncipe Ghazi de Jordania un descendiente del profeta Maoma y consejero especial del Rey Abdullah. No es al primera vez que esta figura del Islám aparece públicamente aliado con destacados miembros del catolicismo. Por lo visto, la globalización (homogeneización, integración, etc) religiosa ya estaría siendo inducida en nuestros días con algunos representantes de la Elite dando ejemplo. Debe quedar claro que la harmonía es algo de lo que precisa este mundo, pero cuando esta viene promulgada por fuerzas que se caracterizan por destruirla a cambio de una buena suma, habrá que ponerla en cuarentena.

A. Sempere