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Evidencias para cuestionar la existencia de AlQaeda

Retrato Robot de Bin Laden e imagen de Llamazares

  

Recientemente hemos dedicado una entrada sobre el libre acceso de ciertas agencias de inteligencia a todo tipo de información privada en internet (tiene un blog denuncia? fotos en facebook?) y la elaboración de listas de terroristas basadas, en algunos casos demostrados, en el grado de activismo social y/o político de cada persona. Esa lista contiene más de un millón de nombres y nicknames asociados. Muchos pueden haberse preguntado sobre las evidencias que existen para pensar que en esa lista hay información privada (lo cuál nos parece tremendamente inocente). Hoy, sin embargo, es Gaspar Llamazares (líder de la formación política española Izquierda Unida, IU) quién parece preguntarse si su nombre y datos personales figuran en alguna ficha del FBI norteamericano asociados a su ideología política (la cuál por cierto, es caldo de cultivo de lo que será considerado un terrorista en un futuro próximo según el «Diccionario léxico de extremismo doméstico” lanzado el año pasado por la DHS, Department of Homeland Security).   

 La bomba estallaba el pasado viernes en las páginas de el diario elmundo.es. Un avispado lector avisaba a miembros del diario online sobre el asombroso parecido entre una foto de Gaspar Llamazares usada en campaña electoral y el retrato robot elaborado por el Departamento de Estado de EEUU y publicada en la página oficial del programa ‘Rewards for Justice’, una iniciativa creada en 1984 para conseguir pistas que pudieran llevar a la captura de terroristas a cambio de cantidades que llegan hasta los 25 millones de dólares (unos 17 millones de euros) en el caso de Osama Bin Laden (ofrecer esa suma por alguien que, en palabras de Benazir Bhutto antes de morir a la BBC, ya está muerto hace algunos años, nos da unas primeras pistas sobre el tipo de montaje publicitario del que estamos hablando).  

Una comparación del rostro de Osama Bin Laden en todos y cada uno de los videos (supuestamente grabados por AlQaeda para reivindicar sus atentados) desde el 11-S, es suficientemente revelador sobre lo «literario» de toda esta maquinaria de justificación de acciones bélicas basada en AlQaeda y Osama Bin Laden. Como habrán comprobado las coincidencias en estas imágenes se limitan al turbante y la barba. Ni el tono de la piel, ni los rasgos que conforman la nariz y los ojos coinciden en todas estas imágenes fugazmente pasadas en los noticiarios de tanto en tanto… No contentos con esto, y en un intento de manipulación desenmascarado por dicho lector, el FBI se basa en la foto de Gaspar Llamazares para elaborar una imagen del ficticio personaje. Siguiendo la agenda para mantener viva la leyenda de este personaje que tantos beneficios económicos y sociales les está trayendo a la Elite, el FBI y/o la CIA (una es la que publica o maneja la lista de terroristas, pero parece ser la CIA quien elabora las pesquisas y fichas personales) se vale de la imagen de un político completamente desconocido fuera del panorama español (y más aún en EEUU) para mantener esta farsa. Probablemente las posibilidades de que alguien reparase en esta maniobra eran muy bajas, pero aún así esto no supone ningún problema. Varios pedidos de disculpa, probablemente nula cobertura en EEUU, unas palmaditas en la espalda del Sr. Llamazares y a seguir elaborando fichas de teóricos enemigos del sistema gracias a las facilidades ofrecidas por varios de los gigantes de la informática.  

Una comparación de ambas fotos muestra a las claras que el pelo de ambos es grisáceo, canoso, algo ondulado… Idéntico. Y no sólo el pelo; también la frente es exacta, con esa arruga que la recorre de sien a sien. Según informaba elmundo.es. Una fuente del gabinete de prensa del Departamento de Estado confirmó  que el ‘retrato robot’ es obra del FBI. También expresó su sorpresa. «¿Y estás seguro de que es un político español?», dijo al enterarse de la coincidencia. Esta frase manifiesta, con gran cinismo, la sorpresa de dicho individuo ante el hecho que alguién haya sido capaz de reconocer la maniobra. Parece ser que los organismos de inteligencia no son los únicos que andan recabando informaciones por internet. «Me alegro de que no sea cosa del Departamento de Estado, sino del FBI, y me alegro también de no estar en la piel de quien haya hecho esto«.  

Desde la Oficina de Seguridad Diplomática –entidad responsable del programa ‘Rewards for Justice’–, el portavoz David Bates reconoció que aunque el sitio web dependía del Departamento de Estado, la imagen de Bin Laden se creó en los laboratorios del FBI.  

«Varias agencias de seguridad estadounidense participan en la iniciativa. Los laboratorios del FBI actualizaron su fotos de Bin Laden y de paso decidieron ofrecernos las imágenes para nuestro sitio web«. Por su parte, el FBI asumía con orgullo su papel en la creación de la imagen; en un comunicado de prensa sobre las fotos Louis E. Grever, director adjunto para Ciencia y Tecnología, tilda las imágenes de ser «poderosos ejemplos de cómo los avances en la tecnología y la ciencia se pueden utilizar para ayudar a encontrar y llevar ante la Justicia a las personas buscadas«. Esta frase es tremendamente pavorosa. Quienes son las personas buscadas? No sería, acaso, posible por extensión usar dicha tecnología para acusar a quienes desde dichas agencias se quiera? Qué evidencias presentan estos señores ante el ciudadano para ratificar la validez de dicho retrato?Es un adelanto usar la tecnología para crear un personaje, un avatar (tan de moda en los últimos tiempos) para alimentar historias de piratas y terroristas? Es un adelanto que la tecnología permita llevar ante la (in)Justicia a cualquier persona a la que se desee involucrar con estas poderosas herramientas?   

Pero esta no es la única tecnología de la que disponen. Thierry Messian alertaba en otro post publicado en OR, sobre la manipulación de Twitter durante los altercados post-electorales en Irán y de la intervención de cualquier llamada efectuada desde un teléfono móvil en cualquier parte del mundo. También tuvo repercusión hace unos años la famosa foto trucada de los supuestos ensayos nucleares iraníes? si se pueden multiplicar en número de misisles en la foto sin que se note, cómo podemos saber que de hecho alguno de ellos estuvo realmente allí? Qué pasa con los registros de nuestros ordenadores? Elaborar una lista de la magnitud de aquella que maneja el FBI requiere la colaboración de los fabricantes de software. Además de los spywares, deberíamos estar alerta sobre las operaciones que algunos de los programas más populares efectúan en la sombra mientras elaboramos un texto o leemos una página web:  

 «El FBI tiene y seguirá aplicando de vanguardia forense, biométricos, y las capacidades técnicas de nuestros casos más difíciles. Junto con muchos de nuestros socios, tanto aquí como en el extranjero, pedimos que el público nos ayude a localizar y detener a aquellos que nos amenazan«.  

Con esta frase nos dejan claro que en un futuro muy próximo no se va a tolerar ni una. Cualquier atisbo de disidencia será tildado de terrorismo.  

«Nuestros artistas forenses tienen una amplia variedad de rasgos genéricos de la cara -ojos, tipos de pelo, etcétera- que pueden elegir del programa que usamos para crear estas imágenes simuladas. Por alguna razón un técnico en particular no estaba satisfecho con el pelo que ofrecía el programa, y por iniciativa propia decidió acudir a las imágenes de Google«. He aquí uno de los probables parteneres tecnológicos a los que hacíamos referencia…  

Según explica Hoffman, mediante la opción de búsquedas avanzadas de Google Imágenes, el técnico se guió por las claves «caras» y «una variedad de nombres islámicos» para conseguir caras con los rasgos adecuados. En una de las búsquedas -no recuerda cuál exactamente- surgió la cara de Llamazares y le gustó.  

«Lo que hizo el artista forense es completamente irregular. Está completamente fuera del proceso establecido que se ‘robe’ un rasgo de una imagen pública en su totalidad«.  

Sin embargo esta excusa se desmonta ante la aparición de una segunda imagen que usa los rasgos de Llamazares. En este caso, otro lector avisó en los comentarios de la noticia en elmundo.es de que al libio Atiyah Abd al-Rahman le ocurre exactamente lo mismo.»Atiyah es el emisario de Al Qaeda en Irán, nombrado por Osama bin Laden«, explica el sitio web del programa ‘Rewards for Justice’, administrado por el Departamento de Estado de EEUU. En la descripción se le atribuyen al terrorista tareas de «reclutamiento» y coordinación con «otros grupos islámicos«.  

Quien puede demostrar que todos estos personajes son reales? Quien nos dice que nos más que unos engendros creados mediante un algoritmo informático usando características físicas colectas de un inmenso archivo gráfico? Según informaciones ofrecidas en el reportaje Zeitgeist-The Movie (2007), Bin Laden se encontraba en una base militar norteamericana en Oriente Medio el propio 11-S. Autores como Daniel Estulin han afirmado que éste trabajaba para la CIA, y Benazir Bhutto en la entrevista censurada en la BBC (la versión integra puede encontrarse en youtube) afirmaba que éste habría sido asesinado a manos de la misma persona que había intentado asesinarla recientemente y según le habría sido informado por miembros de seguridad de su gabinete (probablemente otro agente de la CIA). Si todas estas informaciones son ciertas, el personaje de Osama Bin Laden estaría libre para ser asociado al engendro AlQaeda sin que nadie vaya a protestar por ello. Si juntamos a todo esto una serie de rostros diferentes de Bin Laden en la serie de videos que han pasado estos años por TV, y este programa de generación virtual de personajes… parece existir bastantes evidencias para, aplicando el cientifico principio de la navaja de Ockham, cuestiornarse profundamente la existencia real de AlQaeda. Tras la escandalosa mentira de la Gripe A (la cual empieza a vislumbrarse), no nos sorprendería si todo el entramado AlQaeda fuese una ilusión de la era digital. Sobre los atentados aquellos que son reales podrían venir desarrollándose por grupos próximos a los servicios de inteligencia de la Elite y otros podrían ser una ilusión digital (el uso de imagenes que simulan a las obtenidas por teléfonos móviles, en las que nada puede verse con detalle, inundan los informativos en los últimos tiempos).   

Llamazares exige explicaciones

Llamazares se quedó muy sorprendido el viernes por la tarde, cuando recibió la noticia y comprobó en ELMUNDO.es que su pelo y el del supuesto Bin Laden son idénticos. El ex líder de IU dijo que pedirá al Ministerio de Asuntos Exteriores español que reclame explicaciones de lo ocurrido «a quien corresponda de EEUU«, informa Augustín Yanel. Fuentes de IU resaltaron que esto ha ocurrido con un político conocido, cuya fotografía puede ser encontrada con facilidad y que tiene la posibilidad de acceder a los medios de comunicación. Lo preocupante, indicaron, es que le pueda ocurrir a un ciudadano de a pie, que se encontraría indefenso ante la utilización de su imagen y, además, si viajara después a EEUU podría encontrarse con serios problemas e incluso ser detenido. Llamazares ha criticado duramente los llamados ‘vuelos de la CIA’, que hicieron escala en aeropuertos españoles y en los que EEUU trasladaba a presuntos terroristas a otros países donde no se respetan los Derechos Humanos, para someterlos a torturas durante los interrogatorios con el fin de lograr su confesión. «En IU no creemos en las casualidades«, declaró un portavoz.  

Ante el escándalo diplomático, Hoffman dijo que el FBI revisará el procedimiento que se usa para crear los retratos robot y dijo que el artista forense será sometido a una investigación «para asegurarnos de que esto nunca vuelva a pasar. El Departamento de Estado dará una explicación oficial«. Por su parte, el portavoz también negó que se hubiera ultilizado a Llamazares por oscuros motivos. «Podemos confirmar que esto de ninguna manera se hizo aposta. No se trata de una acción en contra del político español. Dicho simplemente, el artista forense no tenía la menor idea de quién se trataba«. Artista forense es una bonita palabra cuando se refiere a un agente del FBI.  

El nuevo embajador de Estados Unidos en España, Alan D. Solomont, envió hoy a dos técnicos de para que explicaran al diputado Gaspar Llamazares lo que ha ocurrido con la fotografía suya que ha utilizado el FBI para confeccionar dos retratos robots de terroristas, entre ellos el del más buscado del mundo, Osama bin Laden. Durante casi media hora, el diputado y ex coordinador general de Izquierda Unida escuchó en su despacho del Congreso las explicaciones que le dieron una representante de la sección consular legal y un agregado del FBI de la embajada, pero no le convencieron y le parecieron insuficientes. La embajada estadounidense solicitó ayer por la tarde visitar a Llamazares en su despacho, y éste -que ha solicitado por escrito una entrevista con el embajador, para tratar este asunto- aceptó y los recibió hoy. Durante el encuentro, Llamazares ha comunicado a esos dos representantes de la embajada lo mismo que dijo ayer en una rueda de prensa. En resumen: mantiene una «seria preocupación« por la utilización de sus rasgos y las consecuencias que pueda tener la difusión de los retratos robot, y que también le preocupa la posibilidad de que el FBI pueda haber hecho lo mismo con las fotografías de otros ciudadanos.  

Al no convencerle las explicaciones que recibió, Llamazares trasladó a sus dos interlocutores su exigencia de que se investigue a fondo lo ocurrido y se informe del resultado al Gobierno español, y que se depuren las responsabilidades correspondientes. También reclamó que expliquen con «absolutas garantías» cómo encontró el FBI su fotografía en Google y que le digan si esos servicios de inteligencia estadounidenses, o cualquier otro organismo oficial de aquel país, tienen en sus archivos datos de personas vinculados a su ideología política. El diputado de IU quiere, y así se lo ha dicho a los dos enviados de la embajada, que le garanticen que los retratos robot confeccionados con su cabello, o los de otras personas realizados con ese mismo método, no van a acarrear problemas en el futuro para él ni para los afectados. También les pidió que desde el FBI, el Departamento de Estado estadounidense o cualquier otro organismo que haya tenido relación con estos hechos se ofrezcan explicaciones públicas «al más alto nivel«, tanto en España como en Estados Unidos y el resto del mundo.  

Mientras tanto, desde IU han confirmado que la imagen de Llamazares de la que procede la nueva ‘peluca’ del líder de Al Qaeda es original y corresponde a la campaña de las elecciones generales de 2004, época en la que aún gobernaba el PP de Aznar ferviente defensor de la guerra al terror.  

Segundo terrorista virtual creado con la imagén de Llamazares

  

AlQaeda mata a más musulmanes que occidentales.  

 Muy pocos se atreverían a negar que los musulmanes también son víctimas del llamado terrorismo islámico. Sin embargo, un nuevo estudio del Combating Terrorism Center en los EEUU ha desvelado que una abrumadora mayoría de las víctimas de AlQaeda son, de hecho, musulmanes. Ante una evidencia de esta importancia, pues ello nos da nuevas evidencias de quienes pueden estar realmente por detrás de dicho grupo, los medios occidentales (inmersos en plena promoción de la Guerra al Terror II) se han puesto en acción.  

Algunos como el alemán Spiegel se preguntan si esta supuesta guerra contra los no creyentes puede permitirse el lujo de matar también a musulmanes. A continuación prosigue proclamando que incluso AlQaeda se mustra contrariada con esta pregunta. Según dicho diario, un supuesto ideólogo de AlQaeda, Abu Yahya al-Libi, habría desarrollado su propia teoría teológica de daños colaterales que permitiría a sus militantes matar también a musulmanes si no fuese posible evitarlo. Esta rocambolesca teoría para intentar justificar de modo lamentable una temida realidad: como puede ser AlQaeda una organización islámica cuando sus víctimas son, en su inmensa mayoría, musulmanes? La respuesta es sencilla, no se tratará de un producto de la Elite y sus servicios de inteligencia para, aprovechándose del miedo y la confusión generada, erosionar nuestras libertades y extorsionar (o destruir como en los casos de Irak y Afganistán) a todos aquellos que se resistan a sus designios?  

Prosigue el Spiegel proclamando que incluso los miembros iraquíes de la organización terrorista (quienes según esta publicación son conocidos por ser especialmente sangrientos), también piden que se reconsidere esta cuestión. Las pruebas en las que se basa dicha afirmación no pueden ser más ambigüas: en un mensaje reclamando su responsabilidad por unos ataques en Baghdad, el pasado mes de agosto, el grupo deseó una rapida recuperación a aquellos Sunnies lesionados en la «operación» y expresó su esperanza de que aquellos que murieron sean aceptados por Dios como mártires.  

Teniendo en cuenta las inexistentes pruebas de autenticidad ofrecidas al ciudadano, esto puede haber sido escrito por cualquiera y no parece suficiente evidencia, por si misma, para justificar que las muertes en Oriente Medio se deban a un autogenocidio. Entre 2004 y 2008, por ejemplo, AlQaeda reveindicó su responsibilidad en 313 ataques que resultaron en 3010 muertos. Y aunque estos ataques incluyen acciones en occidente- Madrid en 2004 y Londres en 2005 — sólo el 12% de los muertos en dichas acciones eran occidentales (371 muertos). Este último dato es revelador. En los últimos desastres naturales tampoco mueren practicamente occidentales (ver localización de algunos de los mayores tsunamis de la historia, curiosamente 20 de ellos se han producido desde la década de los 90).  

Los autores de este nuevo informe del  Combating Terrorism Center (CTC, en la Academia Militar de West Point en Nueva York) —Vanguardia mortífera: Un Estudio de la Violencia de AlQaeda contra los Musulmanes –,  admiten que el gran potencial de inexactitud en estos datos proviene de la clasificación de las víctimas como: Occidental o no occidental. La asunción que ser occidental también significa no musulmán. No todos aquellos que viven en el mundo musulmán los son y viceversa. Teniendo en cuenta los condicionantes religiosos por encima de los nacionales,  si uno examina los ataques perpetrados en 2007 en Irak y Afganistán el porcentaje de muertos no occidentales fue del 99 % y en 2008 del 96%.  

Sobran comentarios adicionales…  

A. Sempere